martes, 11 de junio de 2024

Nils Frahm - Tripping With Nils Frahm (2020)



Hemos hablado en muchas ocasiones de Nils Frahm incluyéndole en la corriente clásica/electrónica de los últimos años junto con otros artistas como Olafur Arnalds, Max Richter o Alexandra Hamilton Ayres pero siempre ha sido para dar contexto a la obra de otros artistas sin centrarnos hasta ahora en la suya (salvo por su participación puntual en la banda sonora de "Ad Astra"). Seguro que no será la última vez que aparezca en el blog porque es un músico de lo más interesante y uno de los eslabones más atractivos entre la electrónica setentera, al estilo de la “Escuela de Berlín” (Frahm es berlinés) y la última generación de músicos minimalistas.


La relación de Frahm con la música viene desde niño aunque los orígenes familiares de la misma son, como mínimo, curiosos. Resulta que su padre Klaus es un renombrado fotógrafo y, aunque su obra está más orientada hacia la arquitectura, durante un tiempo fue el encargado de crear las portadas de algunos discos del sello ECM, entre ellos la del extraordinario “As Falls Wichita, So Falls Wichita Falls” de Pat Metheny y Lyle Mays. A pesar de que la mayoría de esas portadas son de discos publicados antes del nacimiento de Nils, seguro que toda aquella música formó parte de la banda sonora de su infancia que enseguida iba a dar con él en el conservatorio donde estudiaría piano a la vez que experimentaba en su casa y en la escuela con las cualidades del sonido jugueteando con mesas de mezclas y pedales de efectos electrónicos.


A lo largo de su extensa discografía, Nils Frahm ha creado un sonido muy particular en el que combina viejos sintetizadores analógicos con el piano aunque en este punto hay que decir que no utiliza uno convencional ya que desde 2014 colabora con el fabricante David Klavins, conocido por construir modelos muy peculiares como su “Modell 370”, un piano vertical en el que la cifra “370” alude a su altura y es que el instrumento abarca dos pisos con el intérprete situado en el piso superior y las cuerdas descendiendo desde ahí al piso inferior lo que genera un sonido único. Junto con Frahm, Klavins diseñó otros dos modelos: el “Una Corda”, más manejable y en el que cada tecla acciona una sola cuerda (en un piano convencional suele accionar tres o dos si es vertical) y el “Modell 450” del cual creemos que no le será difícil al lector adivinar su característica principal. El disco que comentamos hoy es una grabación en directo realizada en 2018 en la sala Funkhaus de Berlín a lo largo de cuatro conciertos de los que serían editados algunos extractos, tanto en DVD como en CD. Las actuaciones fueron el comienzo de una extensa gira en la que el músico presentaba su disco “All Memory”


“Enters” - El primer corte del trabajo no pertenece a ningún disco anterior del músico por lo que entendemos que, o bien se compuso específicamente para la ocasión, o es una improvisación (también cabe la posibilidad de que se nos haya escapado). En todo caso, se trata de una pieza muy pausada, con largas notas que se extienden en el tiempo antes de dar paso a la siguiente y funciona como una especie de calentamiento para el resto del espectáculo.


“Sunson” - La gran mayoría de las composiciones seleccionadas para el disco pertenecen a “All Melody” como ocurre con esta. Tras una introducción de piano entran en escena los sintetizadores para crear una atmósfera muy cinematográfica que nos recuerda, en cuanto a estilo, a algunos trabajos de Johann Johannsson. Una serie de repeticiones del motivo central nos van conduciendo a la parte más rítmica en la que los sonidos electrónicos reinan sin discusión con una elegancia alejada de todo exceso. Fondos de Mellotron, flautas sampleadas y timbres analógicos se confabulan para embarcarnos en un viaje extraordinario.


“Fundamental Values” - Frahm no se limita a tocar versiones más o menos ajustadas de sus temas de estudio sino que, en algunos casos, los retuerce y los alarga hasta convertirlos en algo casi nuevo. Aquí tenemos un buen ejemplo en el que la pieza original, que no llega a los cuatro minutos, se extiende a lo largo de casi un cuarto de hora. Con un enfoque muy en línea con algunas corriente minimalistas, el tema se construye poco a poco a partir de una célula que se repite constantemente. A ese bucle se le van sumando otros elementos y capas de forma parsimoniosa hasta crear un tapiz de gran complejidad. Pianos de juguete, sintetizadores, pianos “normales”, Fender Rhodes y otros teclados van dejando su aportación en un corte casi jazzístico en el que no es difícil encontrar la influencia sonora del sello ECM e, incluso, la del teclista noruego Oystein Sevag. Una travesía ambiental fascinante que nos muestra todas las características del estilo de Frahm.




“My Friend the Forest” - El siguiente tema está más centrado en el piano, con las alteraciones sonoras habituales en el músico.  Formalmente es una pieza de jazz muy bien estructurada, con un desarrollo extremadamente tranquilo en el que todo sucede a su tiempo y los silencios son tan importantes como la música.


“The Dane” - Poco después de publicar “All Melody”, el músico alemán publicó “All Encores”, una recopilación de descartes y temas que no estaban finalizados cuando lanzó el trabajo principal. A ellos pertenece esta pieza corta de piano con un estilo muy cercano al del sello norteamericano Windham Hill, especialmente al George Winston más intimista aunque con una gran dosis de improvisación a partir de la melodía principal por parte de Frahm.


“All Melody” - Con este tema pasa lo mismo que con el anterior “Fundamental Values” y es que Frahm se deja llevar ofreciéndonos una revisión considerablemente más extensa que el original. En ella volvemos a los ritmos pulsantes que a veces suenan como una especie de deconstrucción de las vertiginosas secuencias de Ray Lynch y otras al Jean Michel Jarre más abstracto de obras como la tercera parte de su “Oxygene” de 2016. En el segundo tercio del tema, ese nervio rítmico del primero se relaja y entramos en una serie de paisajes atmosféricos de gran belleza para recapitular en el segmento final y regresar a los conceptos del comienzo reforzándolos con múltiples líneas tanto rítmicas como melódicas dando como resultado una mezcla mágica en la que destacan las fantasmales voces del final que terminan por dar un toque onírico al conjunto.




“#2” - La siguiente pieza comienza de un modo muy directo con una secuencia repetitiva que nos aborda desde el primer momento y nos remite a clásicos del minimalismo como Terry Riley pero enseguida da un giro hacia una electrónica más actual e incluso bailable. Volvemos a encontrar trazas de algunos experimentos recientes de Jarre. Quizá sea la versión menos aventurera de un Frahm que se acerca mucho aquí a las encarnaciones más recientes de artistas como Klaus Schulze, Peter Namlook o los propios Tangerine Dream.


“Ode – Our Own Roof” - Para cerrar el trabajo, Frahm recurre a dos composiciones de otros trabajos anteriores: “Ode”, del disco “Solo” de 2015 y “Our Own Roof” de la banda sonora de la película “Victoria” del mismo año. La primera es una pieza puramente ambiental con largos acordes que se quedan flotando en el tiempo y la segunda centrada en el piano pero siempre en ese mismo tono tranquilo tan adecuado para una despedida.



Tenemos que reconocer que la experiencia de asistir a un concierto de Nils Frahm no es reemplazable por un disco en directo porque la actuación del propio músico es un espectáculo en sí. Frahm actúa en solitario y se encarga de accionar todos los dispositivos (pedales de efectos, mesas de mezclas, etc.) y de tocar todos sus instrumentos en vivo, sin trampa ni cartón. En todo caso, hemos pensado que este “Tripping With Nils Frahm” es una magnífica manera de introducirse en su obra ya que repasa uno de sus mejores discos con las adiciones propias del show en directo. En todo caso, es seguro que más adelante volveremos sobre él para hablar de otros de sus trabajos. De momento, disfrutad con su directo del que os dejamos aquí el tráiler anunciador:




2 comentarios:

  1. Me sorprende que hayas decidido empezar por aquí y no por All Melody o Spaces, aunque no por ello la decisión me parece menos acertada. No conocía este directo y me ha parecido espectacular. Algunos temas superan con creces su version de estudio, aunque en conjunto me quedo con All Melody (al que pertenece la mayoría de temas). Nils Frahm es un músico impresionante, de lo mejorcito en cuanto a música instrumental se refiere. Gracias por estos descubrimientos!

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  2. Uffff a mí es que todo este Post-minimalismo me aburre jeje y la Factoría Zimmer también, son todos tan aburridos hoy día. A mí que no me saquen de la melancolía de los 70 y 80; Kraftwerk, Jarre, TD, Vangelis, Schulze y también admito a Enigma y Schiller por aquello del chill-out y ya. Todos ellos son el gran espejo de todo compositor de música electrónica donde se mira hoy día.

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